El pasado viernes 29 de julio fue radicado el proyecto de Ley de Presupuesto General de la Nación (PGN) para la vigencia de 2023. Si bien el gobierno nacional cumple con la garantía establecida en el estatuto tributario, no existe en las disposiciones generales un plan de amortización de la deuda histórica de la nación con el SENA, se concibe el presupuesto del SENA y de otras entidades como una “inflexibilidad presupuestal”, y la inflación erosiona las finanzas. Fortalecer las finanzas del SENA es una oportunidad para garantizar de forma plena el derecho a la formación profesional de los y las trabajadoras de Colombia.
Con un mensaje presidencial que muestra un escenario contradictorio al estado de las finanzas, el gobierno Duque radicó el último proyecto de ley de PGN para 2023 ante el Congreso de la República. El proyecto de Ley apropia un total de 391,4 billones de pesos, siendo distribuidos los ingresos en 63% con recursos corrientes de la nación (principalmente impuestos) y en 28% con recursos de capital (endeudamiento, rendimientos financieros, entre otros). La deuda crece, se engulle gran parte de los recursos, una situación que lega el gobierno de Duque, pero que curiosamente no es mostrada como un problema real para las finanzas públicas.
Y es que la deuda, después de las transferencias (incluyendo SGP, salud y pensiones absorberán 190,7 billones de pesos en 2023) corresponde al rubro de gasto más representativo en el PGN (20% del total, con 78 billones de pesos), con dos agravantes: por un lado, estamos en la espiral Ponzi, pues se pagan más intereses que amortizaciones y la situación entre 2022 y 2023 se agravará ante la disminución de la relación entre el pago de la principal y los intereses que para 2022 fue 0,99 y para 2023 bajará a 0,9, esto es, más representación tendrán los intereses; y por otro lado, en que la deuda adquirida en el último período privilegió el canal externo, pasando de 4 billones de pesos en 2022 a 10,7 billones de pesos en 2023, situación que hace más costoso el endeudamiento por efectos de devaluación.