Los fuertes aguaceros que se presentan en la ciudad de Bogotá permiten nuevamente dejar en evidencia la grave crisis de infraestructura que hoy enfrentamos y que se suma al abandono por parte de la administración regional y general desde hace varios años, puesto que posterior a las lluvias del 20 de septiembre, lo que nos queda en los centros de formación son inundaciones, humedades, grietas y talleres de formación con equipos en riesgo por las fuertes lluvias.
Para el caso del complejo del Sur y Paloquemao es evidente el daño en las terrazas y cubiertas, además hoy nos preguntamos por qué dicha situación se sigue presentando, si mediante la centralización de recursos de las vigencias pasadas se suscribió un contrato con el contratista ALFA desde la Dirección Administrativa y Financiera para el cambio de la tela asfáltica de las terrazas del complejo del Sur y hoy pareciera que fue peor el remedio que la enfermedad.
En el marco del mismo contrato en la torre oriental y occidental del complejo de Paloquemao se avanzaron en algunas acciones de impermeabilización y cambio de tejas, pero estas no se realizaron en su totalidad y ante las lluvias las canales son muy pequeñas y su capacidad es insuficiente.
En los dos complejos tenemos reportes y evidencias de que en salones y laboratorios las filtraciones de agua fueron abundantes, se inundaron los pisos y los equipos costosos de automatización, mecatrónica, electricidad y electrónica se vieron afectados, ocasionando también riesgo para los trabajadores y aprendices que circulan por dichos espacios y sin activación de los planes de emergencia.
Estas fallas en los contratos de obra y mantenimiento de la infraestructura provocan afectaciones tanto a las personas, como a las máquinas y equipos especializados, por ello exigimos desde SINDESENA Subdirectiva Bogotá la intervención de la Dirección Administrativa para que se dé lugar a las acciones que le corresponden y que están relacionadas con el cumplimiento a cabalidad de todos los servicios contratados y se apliquen las pólizas por garantía, corrigiendo las humedades y deterioro en techos y paredes que se tienen identificados en los centros y que según informan se han reportado.
Instamos a la Dirección General a examinar detenidamente la ejecución de dichos contratos y a la Dirección Administrativa a cumplir su papel en el marco de la supervisión de los contratos que ha suscrito, pues estas quejas e incumplimientos se están presentando en varias regionales sin obtener soluciones de fondo y pareciera una negación a la aplicación de las garantías y multas correspondientes.